PRODUCTOS

 

Luego de varios años de investigación en la cadena productiva de los frutales amazónicos del departamento como son Arazá, cocona, copoazú y piña nativa, entre otros; se han obtenido importantes conclusiones para el sector empresarial que cobija este segmento de la producción regional. En primer lugar, una vez analizados los diferentes resultados obtenidos por el grupo de investigación CANANGUCHALES conformado por estudiantes y tutores de la UNAD Florencia, se pudo determinar que la cadena hortofrutícola presenta innumerables ventajas comparativas en el departamento con respecto a otras regiones del país, las que pueden obedecer a su posición geográfica, al clima, a la condición de los suelos, entre otras razones que facilitan su cultivo y cosecha. Así mismo, se pudo resaltar que el fruto caqueteño viene ganando un valioso posicionamiento al interior del país por la apreciación de sus sabores exquisitos y diferentes a las frutas tradicionales; esto sin incluir las enormes posibilidades de exportación a otros mercados del mundo donde el gusto por este tipo de productos va en crecimiento durante los últimos 10 años.

 

Sin embargo, según estudios realizados por CORPOICA[2], “la producción de frutales amazónicos en todo el departamento y especialmente en Florencia es muy artesanal, hace falta desarrollar procesos de mejoramiento en todos los eslabones, pero específicamente recalca la importancia de fortalecer la asociación de todos los actores de la cadena para lograr su consolidación, debido a que en forma individual es imposible obtener avances en el crecimiento económico del sector”. Resalta la necesidad de mejorar los procesos de empaque, transporte y distribución de la fruta y de los productos transformados ya que tan solo un 14,1% de empresarios realizan estos procesos en mejor forma, a pesar del costo adicional que deben asumir.

 

Referente al eslabón de Comercialización de la cadena productiva hortofrutícola, existe la necesidad de empezar a fortalecerse ya que actualmente el posicionamiento en la mente del consumidor de estos productos es bajo, ya que según datos de los investigadores el 46% de personas encuestadas no conocen que son los frutales amazónicos y un 48% que alguna vez y en forma esporádica ha consumido la fruta, pero aún mas significativo un 28% que hasta ahora no ha probado la misma. Estos resultados se pueden mejorar con la consolidación de la cadena y de cada uno de los eslabones, para esto cada integrante debe de apropiarse del desarrollo y crecimiento de la misma, a través de la promoción y mercadeo de los frutos amazónicos, los cuales cuentan con gran aceptación en la comunidad que actualmente los consume, especialmente en otras regiones del país.

 

A nivel comercial, la falta de publicidad y promoción de los productos tanto fruta fresca como los transformados, se corrobora cuando los estudiantes argumentan que el sector hortofrutícola aún no ha implementado ninguna estrategia publicitaria por cuanto el 85% de la población desconoce algún comercial que promocione sus productos. Tan solo se puede hacer referencia a productos transformados como los que trabaja la empresa Chagra Maguaré y Mukatri que promocionan muy poco, estose debe a que realmente, los propietarios y administradores de las comercializadoras prefieren vender sus productos a otros intermediarios y a nivel nacional con el fin de no incurrir en costos promociónales y publicitarios.

 

Los resultados obtenidos en los proyectos de investigación[3] de los estudiantes de la UNAD, permiten evidenciar un proceso de desarrollo de las cadenas productivas en los cuales se identifican un sinnúmero de problemáticas y de fortalezas que facilitan la implementación de estrategias y políticas acordes con el requerimiento de progreso y desarrollo de la región. Pese a lo anterior, esta cadena productiva, podría llegar a ser un elemento fundamental en el desarrollo económico regional siempre y cuando los productores y empresa privada, como el gobierno, instituciones gubernamentales y no gubernamentales, y los consumidores finales se concienticen de la necesidad de revaluar la base económica y para esto es necesario empezar a organizarse y asociarse como unidades interdependientes que requieren tecnificación e investigación a aplicar.

 

El eslabón de comercialización de frutos amazónicos, presenta un mayor número de oportunidades para fortalecer la cadena, ya que cuenta con fortalezas propias como son el espacio que se ha ganado en la mente de los consumidores, y la posibilidad ganar recordación al momento de comprar frutas de tal manera que elijan los frutos amazónicos para sustituir a los tradicionales incentivando su consumo; el posicionamiento de la fruta fresca como primera intención de garantizar una continuidad en la producción de las mismas, y posteriormente sostener una demanda de producto fresco y transformado hacia otras regiones del país; las posibilidades de exportación también son interesantes pues es un producto atractivo a un consumidor deseoso de probar sabores exóticos. Los canales de distribución que ya se han generado para la dispersión de los frutos tanto en producto fresco como en producto terminado.

 

Sin duda alguna, el sector hortofrutícola necesita un proceso de capacitación y aprendizaje en el manejo y diseño de estrategias de mercadeo y ventas que les permita posicionar las frutas en el mercado regional como primera medida y luego a nivel nacional e internacional, proceso que debe estar orientado por las universidades regionales que como la UNAD y en conjunto con las Instituciones gubernamentales, puedan adelantar con el fin de brindar herramientas para el pequeño productor, transformador y comercializador para ganar cada vez mayor participación en el mercado y por ende mayores beneficios económicos en un sector que puede ser fundamental para la economía, no sin antes prever que este proceso pueda inferir garantías para otros sectores productivos de productos potenciales para la región.

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